Capítulo 19. "You Only Live Once".

'Live life for the moment
because everything else
is uncertain'
~ Louis Tomlinson ~

-narras tú-

Vamos, vamos, vamos, primer día de colegio y yo voy y me quedo dormida. Normal, si ayer había salido de fiesta; solo a Grace y a mí se nos ocurriría hacer eso. Liz estaba acostumbrada a dormir menos de lo normal, así que no me preocupo pero Grace y yo íbamos a estar como zombies en clase, el primer día.

Liz nos dijo que ella también venía al London High, pero ella era un año mayor.

Corrí a la ducha y cuando salí me vestí así:

Cuando bajé, Grace ya estaba lista, iba así:

-Vamos, llegamos tarde, luego desayunamos después de las dos primeras clases.- me dijo Grace y salimos de ahí.

Diego ya estaba en el coche, él se había encargado de echar la solicitud en el London High y también lo habían aceptado, así que tendríamos que ir primero a secretaría para que nos dieran los horarios y las clases. Habíamos quedado en que Liz nos esperaría en la puerta para decirnos dónde estaba la secretaría del colegio.

Arrancó el coche cuando nos subimos y pisó el acelerador. Diego y yo no nos dirigimos ni una palabra en todo el camino, pero íbamos con prisa así que no había tiempo para discutir.

Cuando llegamos, estaba Liz en frente del aparcamiento esperándonos, iba así:

Nos bajamos del coche y llegamos hasta ella.

-Dale, vamos.- dijo Liz y fuimos corriendo hacia secretaría.

Estaba todo lleno de gente que nos miraba, yo no podía evitar sentirme incómoda, pero los demás parecían no notarlo.

Nos paramos en frente de una puerta, sonó el timbre y Liz se dirigió hacia nosotros.

-Bien, entrad y preguntar, tengo que irme corriendo hacia mi clase antes de que el profesor lo haga, suerte, os quiero.- nos dio un beso en la mejilla y se fue por donde había venido, esquivando a la gente y entró en un aula.

Diego, Grace y yo nos miramos entre nosotros y entramos en secretaría.

-Buenas tardes.- nos dijo una chica que había en recepción que estaba al otro lado del mostrador, tendría unos treinta y cinco años o así.

-Buenas tardes.- le contestó Grace y continué yo hablando.

-Verá, somos Grace Fernández, Diego Martínez y _____ Anne Jones.

-¿Jones?.- me preguntó Diego susurrando en el oído.

-Así mandé mi solicitud.- contesté de la misma manera.

-Sí, aquí tienen sus libros.- nos dio una bolsa a cada uno.- Bien, Fernández y Martínez vayan a la clase de 3.C y Jones, tú vas a la clase de 3.E. Aquí tienen sus horarios.- nos entregó a cada uno un folio con los horarios.- y este es el número de vuestra taquilla con la combinación.- nos dió un papelito pequeño a cada uno.

-Vale, gracias.- dijo Diego y nos pusimos en busca de nuestras taquillas.

(...)

Por fin encontramos nuestras taquillas, la mía era la número 213, la de Diego era la número 220 y la de Grace era la número 216, así que las teníamos cerca.

Miré mi horario. Ya estaríamos en la segunda clase, por lo que me tocaría Física y Química. Dejé mis libros dentro y cogí los de Física y Química mientras Grace y Diego hacían lo mismo, pero con el de Biología.

Cerramos las taquillas y encontramos las clases. Diego y Grace entraron en la suya, y yo hice lo mismo que ellos.

Llamé a la puerta y la abrí.

-Buenas tardes.- dije algo tímida.

-¿_____ Jones?.- dijo, asentí.- Bien, bienvenida, siéntese.

-Gracias.- respodí.

Recorrí la clase con la mirada, había varios sitios libres, pero quise sentarme en un sitio en la esquina al final de la clase. Había una chica castaña de ojos azules y me acerqué. Pude ver como todos me miraban sorprendidos, como si hubiese elegido un mal sitio.

-¿Puedo sentarme?.- dije tímida.

-Claro.- intentó regalarme una sonrisa, pero fue en vano.

-_____.- dije y le tendí la mano.

-Noelle.- me estrechó la mano.

-Shhh.- nos dijo el profesor, y continuó con la clase.

Noelle y yo no volvimos a hablar en toda la clase ya que el profesor era un tanto exigente, pero pude observarla disimuladamente. Tenía un buen cuerpo, pero ella había decidido cubrirlo entero, cosa que me extrañó, pero no me atreví a preguntarle.

Cuando sonó el timbre el profesor abandonó la clase y todos se nos acercaron a Noelle y a mí.

-¿Qué pasa gorda? ¿Tienes una nueva amiga?.- dijo un chico bastante grande.

¿Porqué la llamaban gorda? Ella no era para nada eso, es más, me atrevo a decir que podría ser anoréxica.

-No, ella no es mi amiga, es solo una conocida.- dijo Noelle sin siquiera mirarme. Eso dolió, creí que podríamos llegar a ser algo más que compañeras de clase.

-Mejor.- esta vez una chica alta y rubia de ojos cafés se dirigió a mí, la verdad es que intimidaba.- No te conviene ser su amiga, te lo digo por tu bien, es una puta barata.

Eso me impactó ¿Porqué no podía ser amiga de Noelle? ¿Y porqué se dejaba insultar?

-No creo que ella sea ninguna puta.- defendí a Noelle. 

-Créeme, lo es, ¿no la has visto? Si no es puta, es porque es monja.- contestó otra chica.

Cada vez me sorprendía más. ¿Porqué la trataban así?

-Bueno, yo voy a estar con quien quiera, y si esa persona es Noelle, te jodes.- le contesté a la defensiva.

Un chico se me acercó tentativamente y se puso en frente mía, quedando a centímetros de mi cara.

-No me tientes, muñeca.- su aliento chocaba con mi nariz e hice una mueca de asco.

Dicho esto, todos se fueron. Miré a Noelle confundida. Ella se levantó y se fue corriendo, cargando su mochila a sus espaldas. Esta chica me sorprendía por momentos, la acababa de defender, arriesgándome a que todos los de la clase me odien, y ella se iba corriendo.

No dudé en seguirla silenciosamente ante las miradas de sorpresa de la gente que había por los pasillos. Ella llegó hasta el baño y yo la miré desde la puerta.

Vi que sacaba un cutter y se subía la manga, todo su brazo estaba lleno de cortes profundos. Esa imagen me impactó, y me comenzaba a doler la cabeza, no me gustaba ver imágenes fuertes, pero la gota que colmó el vaso fue cuando vi que derramaba varias lágrimas y comenzaba a cortarse.

-¿¡Estás loca?!.- chillé y le arrebaté el cutter de la mano bruscamente.- ¿¡Tienes idea de las consecuencias que puede llevar esto?!.

-Estoy acostumbrada...- dijo al borde del llanto.

No debía haberle chillado, así que me acerqué a ella sin importar las heridas y la abracé.

-No vuelvas a hacerte eso, por favor.- dije con lágrimas en los ojos. En determinadas ocasiones, era muy sensible.- vamos a curarte esas heridas.- dije y cogí papel y cubrí su brazo que estaba sangrando.

-Gracias, _____, nadie se había preocupado por mí de esa manera.- dijo Noelle volviendo a abrazarme.

-No hay de qué, me gustaría que fuésemos amigas, no te fallaré nunca, lo prometo.- le dije, sonriendo y ella me correspondió la sonrisa.

-No tienes porqué hacerlo.

-Quiero hacerlo.

-Gracias, gracias, gracias.- dijo y me volvió a abrazar, en realidad era buena chica.

-Ahora vamos a la enfermería y curaremos esas heridas. Y esto.- dije señalando el cutter.- me lo quedo yo.- dije, y lo metí en el bolsillo de mi chaqueta, gracias a dios que no era muy grande y cabía en el bolsillo.- sólo vives una vez y no voy a dejar que desperdicies tu vida de esa manera.

Nos dirigimos a la enfermería y le mandé un mensaje a Grace antes de entrar, que seguramente estaría con Liz y Diego tomando algo en la cafetería.

"Luego me acerco a la cafetería.

He tenido unos problemillas.

No te preocupes.

Te quiero.

_____ xx."

Entramos en la enfermería y la enfermera pareció reconocer a Noelle.

-¿Otra vez?.- dijo ésta con pesadez y Noelle asintió.- ¿Tú eres?.- me dijo a mí.

-Una com...-comenzó Noelle, pero no la dejé continuar.

-Una nueva amiga de Noelle, me llamo _____.- le sonreí.

-Bien, vamos a curarte.- dijo y comenzó a limpiarle las heridas.

Según estaba notando, Noelle se había cortado ya varias veces, y había acudido a la enfermería, pero la enfermera no dijo nada al respecto, sólo la curaba y luego ella se iba.

Salimos de la enfermería y me dirigí a Noelle, quedaban 10 minutos de descanso, así que podía presentarle a Liz, Diego y Grace.

-Noelle, ven, te voy a presentar unos amigos.- le dije, dirigiéndome a la cafetería.

-Eh, no, no quiero que me presentes a nadie.

-Vamos, son muy simpáticos, ellos no te juzgarán.

-¿Es que no lo has visto? Todos me juzgan, T-O-D-O-S.

-Ellos son diferentes.

-Diferente mi culo, _____. 

-Como quieras, nos vemos en clase.

Me di la vuelta y comencé a andar, no iba a obligarla a estar con alguien con quien no quiere estar, intentaré no presionarla, aunque quise hacerla creer que me había enfadado. Ella no tenía salud, no tenía salud física ni social, y quería ayudarla de veras.

Cuando entré al comedor, todos me miraban con asco, aunque yo hice caso omiso a ellos y me senté en una mesa donde estaban Liz, Grace y Diego sentados.

-Hey.- saludé.

-Eh, ¿qué pasó?.- me dijo Grace.

-Bueno... -me dirigí a Liz.- Oye, ¿tu sabes quien es Noelle?

-Sí, va a tu clase si no me equivoco, es mejor no juntarse con ella.

-¿Porqué?

-Sufre bullying, _____, te lo podrían hacer a tí, además, he oído que se corta.

-Yo... ¿nunca has pensado en ayudarla?

-Sí, pero no se deja ayudar.

-Yo creo que deberíamos ayudarla, parece buena chica...

-Parece, pero nadie sabe realmente sobre ella.

-_____, ¿qué pasó con esa tal Noelle?

-La vi cortándose en el baño..- dije y les relaté lo que había ocurrido.

-Ahora entiendo, tú eres la chica que la había defendido.- dijo Liz y la miré sorprendida.- Los cotilleos vuelan.

-Yo no voy a dejar sola a esa Noelle, creo que es hora de que su vida cambie.- dijo Grace cuando terminé de hablar.

-Ni yo.- dijo Diego.

Miré a Liz, que por fin habó y dijo:

-Ni yo tampoco.- dijo y la abracé. Se me daba bien convencer a la gente.